La delgada línea entre lo real y lo utópico
Corriendo detrás de la nada una vez más, con mi mente en blanco pero llena de pensamientos que soy incapaz de leer. Así me sentía y así llevaba el mismo tiempo que tú estabas presente, con esa última conversación que tantas noches me robaba el sueño intentando descifrar tus incógnitas. Sueños que me dejaban patas arriba la coherencia y las dudas. Corriendo tras algo que puede no existir, quizás sea cierto e inalcanzable, incierto pero ahí, siempre frente a ti, dándote la esperanza de continuar y no morir.
No hay nada peor que ver la realidad y no querer reconocerla.
ResponderEliminarUn beso, Né.
Cuídate mucho.
¡Uhhhh!
ResponderEliminarBeso
¿Es necesario?
ResponderEliminarohh es bastante angustiante esta entrada. No sé si es que siento que muchas veces me sucedió lo mismo.
ResponderEliminarQuedarme atrapada en algo que como dice Mag,quizás sea una realidad que no quiera ver.
Un abrazo.
Se distorsiona la realidad muchas veces. En realidad se sabe, pero no queremos ver, cegados por ese tipo de amores que no quitan el sueño. El amor debe aportarnos paz, felicidad y no preocupaciones hasta ese punto.
ResponderEliminarUn saludo y buen domingo ⛄
Quise decir que nos quitan el sueño...
ResponderEliminarEs que tal vez tu mente en blanco te dicta estos pensamientos, Né.
ResponderEliminarAbrazos y más abrazos...
Opino igual que Alfred... ¿Es necesario?
ResponderEliminarSaludos y buenas noches.
Hay personas que nos llenan de sensaciones que no entendemos, que nos roban el sueño y el entendimiento.
ResponderEliminarBesos.
La delgada línea entre lo real y lo utópico se clarifica al escribir sobre ello, aunque en el fondo, bien que lo sabemos.
ResponderEliminarAbrazo, Né.
Hola Ne, haces bien al escribir, sera de alguna manera, el inicio de ver lo que no queremos ver,
ResponderEliminarabrazo
Esa última conversación que se queda ahí para siempre. Para ser recordada, repasada en cada detalle que quedo oculto y que el tiempo irá descubriendo.
ResponderEliminarHermoso escrito.